4 ocasiones en las que puede merecer la pena cambiar de trabajo

Todo el mundo se ha planteado cambiar de trabajo al menos un par de veces a lo largo de su carrera, ya sea por una oportunidad mejor, por la sensación de haberse estancado en el puesto actual o simplemente por querer un cambio. Mientras que a los que cambian de trabajo con frecuencia les gusta explorar nuevas oportunidades, a los empleados veteranos a veces les cuesta más decidir si la transición merece la pena; al fin y al cabo, los cambios de trabajo conllevan nuevos retos, como entablar relaciones con un nuevo grupo de compañeros y aprender una serie de tareas y sistemas organizativos totalmente nuevos. A veces las molestias pueden no justificar el cambio, pero hay muchas situaciones en las que un cambio de trabajo puede merecer la pena.

Mejores prestaciones o salario

Un salario bajo o que no se ajusta a los estándares del sector suele ser una de las principales razones por las que los empleados buscan un nuevo trabajo. Cuando el salario actual de un empleado no se ajusta a los estándares del mercado ni al coste de la vida en su ciudad, conseguir un trabajo mejor pagado puede suponer un gran alivio. Sin embargo, los profesionales deben ser cautos a la hora de aceptar un puesto sólo por el sueldo: es importante sopesar otros factores, como un equilibrio saludable entre vida laboral y personal, buenos compañeros y un entorno profesional, así como buenas prestaciones como seguro médico y seguro de vida.

Incompatibilidad con la empresa o el puesto actual

Si un empleado cree que ya no encaja en su empresa actual, puede tener sentido buscar otro trabajo. Tal vez la visión y la misión de la empresa hayan cambiado, lo que hace que algunos empleados se planteen si trabajar allí sigue estando en consonancia con sus objetivos profesionales más amplios. O puede que las funciones y responsabilidades de un empleado hayan cambiado a algo que le entusiasma menos o para lo que es menos adecuado. En cualquier caso, la búsqueda de un mejor ajuste puede ayudar a los profesionales a sentirse más positivos y entusiasmados con el trabajo.

Más oportunidades de progreso

A pesar de los esfuerzos de un empleado, a veces las oportunidades de crecimiento se estancan. Puede que forme parte de un departamento pequeño sin espacio para crecer, puede que necesite experiencia externa para seguir avanzando o puede que un ascenso no esté en el presupuesto. Sea cual sea el motivo, llegar a un estancamiento profesional puede ser un buen momento para buscar oportunidades externas.

Una mejor combinación de habilidades o intereses

La mayoría de las personas en el mercado laboral entienden que aceptan un trabajo porque es la mejor oportunidad disponible, aunque no sea el trabajo de sus sueños. Muchos empleados que aceptan trabajos que no les entusiasman acaban por asentarse en ellos. Y a veces, aunque haya un trabajo mejor, sentirse cómodo puede impedirles aprovechar la oportunidad. Aunque cada persona tiene prioridades diferentes, buscar un puesto que podría ser más interesante o relevante para las habilidades de un empleado puede generar más satisfacción laboral y un mayor sentido del propósito profesional. En esta situación, puede merecer la pena cambiar de trabajo y superar la curva de aprendizaje: esto puede llevar a sentirse más satisfecho en general con la propia carrera profesional.

Fuente: Northwestern MutualContacto: Don Klein,1-800-323-7033