4 formas de ayudar a un ser querido a medida que envejece

Cuando un familiar o amigo entra en la tercera edad, sus necesidades cambian y puede necesitar más ayuda que antes. Pequeñas cosas como hacer la compra o mover los muebles de casa pueden resultar más difíciles. Observar estos cambios puede despertar el deseo de ayudar, pero a menudo es difícil decidir cómo hacerlo, sobre todo si el ser querido en cuestión insiste en conservar su independencia. Pruebe estos consejos para ayudar a un ser querido mayor respetando sus límites.

Sienta curiosidad por su experiencia

En lugar de hacer suposiciones sobre lo que necesita un ser querido, puede ayudar conocer primero su perspectiva. "Pregúntele por su día a día y pregúntele por cualquier dificultad a la que se esté enfrentando", dice el asesor de gestión de patrimonio Ben Voigt de Heritage Planning Partners, una empresa del Grupo de Clientes Privados de Northwestern Mutual. "El simple hecho de incitarles a hablar de sus vidas puede animarles a ofrecer voluntariamente información sobre posibles dificultades financieras, problemas de salud, problemas de movilidad, etc.". Saber escuchar es importante: los adultos mayores no siempre se sienten cómodos hablando abiertamente de sus problemas, sobre todo si es probable que se les juzgue o se les den consejos no solicitados. Por eso, es crucial ser comprensivo y empático una vez que se abren.

Proporcionar compañía

La soledad suele formar parte del envejecimiento -los adultos mayores, que ya no trabajan y a veces se encuentran en un nuevo entorno, pueden sentirse aislados-, pero no tiene por qué ser una característica definitoria. Las personas mayores suelen beneficiarse de cierta compañía, ya sea pasando tiempo con ellos a solas o ayudándoles a encontrar redes sociales duraderas. Es interesante explorar grupos de juego, sesiones de educación para adultos y encuentros comunitarios para mayores. A veces, los centros comunitarios y las organizaciones religiosas organizan eventos específicos para jubilados y personas mayores.

Haga sugerencias cuando le pidan ayuda

En los casos en los que las personas mayores pidan consejo, es apropiado ofrecer sugerencias o información según sea necesario. Un amigo puede pedir ayuda para investigar un problema médico o puede tener preguntas sobre nuevas oportunidades de inversión.

"En algunos casos, lo correcto es recomendarles un asesor financiero o un profesional médico que esté en mejores condiciones para ayudarles a tomar decisiones", afirma Voigt. "Sin embargo, en otras ocasiones puede bastar con recordarles sus opciones. Por ejemplo, alguien que necesite un flujo de efectivo adicional puede no recordar que puede utilizar el valor en efectivo acumulado en una póliza de seguro de vida universal que ya tenga."

Preste atención a ellos

Una de las mejores cosas que cualquiera puede hacer por un amigo o ser querido que envejece es prestarle mucha atención. Busque cambios como pérdida repentina de peso, confusión o aspecto descuidado. Pueden ser signos de problemas de salud, deterioro cognitivo o problemas de movilidad y destreza. Puede ser difícil para ellos hablar de estos temas, pero la observación y la intervención temprana pueden ayudar. A veces, puede ser necesaria una conversación con el cuidador principal de la persona mayor o con la familia.

Cada persona experimenta el proceso de envejecimiento de forma diferente, pero los familiares y amigos comprensivos y compasivos pueden facilitar la transición. Mantener una actitud abierta y curiosa, prestar atención y ayudar cuando sea necesario puede ser la clave.

El objetivo principal del seguro de vida permanente es proporcionar una indemnización por fallecimiento. Utilizar el valor acumulado del seguro de vida permanente para complementar los ingresos de jubilación reducirá la prestación por fallecimiento y puede afectar a otros aspectos de la póliza.

Fuente: Northwestern Mutual

Contacto: Don Klein, 1-800-323-7033