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La manejabilidad de los prestamos a interes simple
Cuando un prestatario pide un préstamo, es muy probable que tenga que pagar intereses. El interés, el precio que se paga por pedir un préstamo, puede ser simple o compuesto. En comparación con un préstamo de interés compuesto, un préstamo de interés simple suele ser más asequible y fácil de gestionar. A continuación, conozca más de cerca los préstamos de interés simple y su funcionamiento. Es posible que los prestamistas no ofrezcan préstamos con interés simple en determinados estados y, en algunos casos, es posible que se ofrezca a una persona un préstamo con interés precalculado).
¿Qué es el interés simple?
El interés simple se refiere a un tipo de interés que sólo se aplicará al saldo principal original de un préstamo o a la cantidad original de dinero que una persona toma prestada. Excluye cualquier interés que ya se haya acumulado y no cambia con el tiempo.
Los préstamos con interés simple pueden incluir préstamos personales, para automóviles o para estudiantes. Si un prestatario sigue adelante con uno, disfrutará de una cantidad fija de pagos iguales que se reparten a lo largo de un plazo o periodo de tiempo acordado.
Cuando alguien hace un pago inicial en un préstamo de interés simple, ese pago cubrirá el pago del cargo de interés con el resto aplicado para reducir la cantidad principal siempre que esa persona haya hecho los pagos a tiempo.
De ahí su nombre, el interés simple es sencillo de calcular. Todo lo que hay que hacer es multiplicar el tipo de interés por el capital y la duración del préstamo en años. Digamos que se pide un préstamo personal de 1.000 dólares con un tipo de interés simple del 5 y un año de plazo. Al cabo de un año, acumularía 50 dólares de intereses. Tenga en cuenta que los pagos podrían excluir las comisiones adicionales que pueda cobrar una entidad.
Interés simple frente a interés compuesto
El interés simple es fijo y sólo se cobra sobre el principal del préstamo anualmente, mientras que el interés compuesto se cobra tanto sobre el principal como sobre los intereses ya acumulados. El interés compuesto puede ser fijo o variable y calcularse diaria, mensual, trimestral o anualmente. Una hipoteca es un excelente ejemplo de préstamo con interés compuesto. Mientras que el interés simple es estupendo para un prestatario, el interés compuesto es preferible para un inversor.
Beneficios de los préstamos de interés simple
Con un préstamo de interés simple, los prestatarios pueden disfrutar de una cantidad de pago establecida durante un periodo de tiempo específico. Si hacen pagos más grandes de lo que se requiere, reducirán su saldo principal más rápido y ahorrarán dinero como resultado. No tendrán que pagar "intereses sobre intereses" y puede que les resulte más fácil liquidar su préstamo antes de tiempo.
El resultado final
Comparado con un préstamo de interés compuesto, un préstamo de interés simple es muy fácil de gestionar. Un préstamo de interés simple es el camino a seguir siempre que una persona tenga un ingreso estable y la disciplina para hacer pagos mensuales planos. No sólo podrá presupuestar sus pagos por adelantado, sino que también podrá liquidar su préstamo antes y ahorrar mucho dinero en intereses.
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